La economía colombiana cuesta abajo

Por: Jorge Vergara Carbó

Recientemente, el DANE dio a conocer el comportamiento de la economía colombiana en el cuarto trimestre y por ende el del año 2022. Hay que abonarle a esa institución que este año se adelantó en la entrega de la información sobre el PIB, dado que normalmente se daba a conocer a mediados del mes de marzo. Tuvimos un año bueno, crecimos al 7.5%, pero no logramos la meta fijada por el ministro de Hacienda y otros organismos de crecer al 8%. En un documento que publicamos en noviembre 21 del año 2022 titulado “Desaceleración Económica o Estanflación” publicado en el periódico La Libertad y otros medios virtuales, afirmábamos que era imposible alcanzar ese 8%, ya que ello significaba que en el cuarto trimestre deberíamos crecer a una tasa del 6.2%, imposible de alcanzar, tal como sucedió ya que su crecimiento fue tan solo del 2.9%, mostrando la desaceleración que empezó a darse desde el tercer trimestre del año.

En el cuadro adjunto, podrán observar cual ha sido el comportamiento de la

PIB A PRECIOS CONSTANTES EN BILLONES $ Y EN DÓLARES 2019-2022

TRIMESTRE 2019 2020 20/19 2021 21/20 2022 22/21

I 206.0 207.7 211.5 1.8 227.7 7.6

II 215.0 179.4 (20) 214.3 18.3 239.4 11.7

III 223.0 203.1 (9.8) 231.2 13.7 247.2 6.9

IV 237.5 228.9 (3.7) 250.3 10.8 257.8 2.9

TOTAL PBI 881.5 819.1 (7.6) 907.3 10.5 975.4 7.5

PBI US$ 268.984 238.630 (12.7) 227.898 (4.7) 202.777 (12.3)

TRM Dic 31 3277.14 3432.50 4.7 3981.16 15.9 4810.20 20.8

PBI A $corie 1060.1 997.7 (6.2) 1192.6 19.5 1463.9 22.7

La economía en los últimos cuatro años, en todos hemos crecido a excepción del año 20220, por la pandemia. Los resultados muestran que, en el año 2021, logramos crecer con relación al año 2019, considerado normal, un 2.9%, y en el 2022, crecimos un 10.6%, con relación al 2019. Lo que significa que, en estos dos años, recuperamos la actividad económica que habíamos alcanzando antes de la pandemia.

Igualmente, muestra como se viene desacelerando la economía desde el tercer trimestre, y especialmente en el cuarto trimestre 2.9%, lo que ocasiono que creciéramos al 7,5%, y no al 8%, como se pronosticaba. Porcentaje que si lo comparamos con el resto de países de Latinoamérica, es un buen resultado, en efecto la CEPAL en su informe dice “En un contexto de incertidumbres externas y restricciones internas, los países de América Latina y el Caribe crecerán un 3,7% en 2022, poco más de la mitad de la tasa del 6,7% registrada en 2021. Se estima que en 2023 se profundice la desaceleración del crecimiento económico y se alcance una tasa del 1,3%”. Colombia es el país, que más creció en América del Sur 7.5%, dado que los demás países crecieron así: Perú 2.7%, Brasil 2.9%, Chile 2.3%, Uruguay 5.4%, Argentina 4.9%, Bolivia 3.5%, Paraguay (0.3%), y se sale del rango Venezuela 12%, y México 2.9%.

Este año no logramos la meta del 8%, debido al crecimiento negativo del sector agrícola y minero (1.9 y 4.5 respectivamente) y la disminución en el cuarto trimestre de la inversión, que disminuyó en $20 billones, con relación al año 2021 (59.7 a 39.6).

PIB DE ACUERDO AL GASTO 2022 EN $ BILLONES A PRECIOS CONSTANTES

Concepto I II III IV Total US$*

Gasto Familia 173.4 177.5 184.2 196.8 731.9 152.155

Gasto Gobierno 31.6 38.6 37.6 49.2 157.0 32.638

FBK 53.1 52.5 59.7 39.6 204.9 42.596

X 32.0 34.0 34.7 36.9 137.6 28.605

M 60.1 62.4 67.8 64.0 254.3 52.866

PBI 229.8 239.8 248.0 257.8 975.4 202.777

FBK=Formación Bruta de Capital X= Exportación M= Importación

*TRM diciembre 31 de 2022 $4.810.20, cifra en millones de US$

Como se puede apreciar el gasto de las familias sigue jalonando el crecimiento económico, a pesar de las medidas restrictivas del Banco de la República de aumentar su tasa de intervención al 12.75%, y la Superfinanciera fijar la tasa de usura para marzo de este año, en el 46.26%. Con estas medidas el Banco de la República espera disminuir la demanda de bienes y servicios para controlar la inflación que, a enero de este año, fue del 13.3%, con la incidencia que el precio de los alimentos subió 26.16%, lo que afecta a los estratos más pobres de la población, ya que ellos destinan un alto porcentaje de sus ingresos al consumo de artículos de primera necesidad.

El gasto de las familias explica el 75%, del PIB del país ($731.9/975.4). por su parte el gasto del gobierno se incrementó fuertemente en el último trimestre en $11.6 billones, y representa el 16%, del PIB, ambos jalonan el crecimiento sumado a la producción de “cocaína” 1400 toneladas anualmente, cuyos precios se mueven por una cadena cuyo valor crece a medida que llega a los centros de consumo internacionales que según estudios realizados por organismos internacionales tiene un valor promedio de US$40.000 millones, cifra superior a las exportaciones del año 2022, pero cuyo dinero no entra totalmente al país. Supongamos que al país entra el 30%, de ese dinero por los distintos canales que utilizan los narcotraficantes estamos hablando de US$12.000 millones, un 5.9%, del PIB del año 2022, que fue de US$202.777 millones. El periodista Ricardo Ávila el domingo 26 de febrero público en El Tiempo, un artículo basado en un estudio de un profesor de la universidad de los Andes en donde afirma que la cocaína aporta el 4.5% del PIB. En un documento de mi autoría citado anteriormente explicaba con detalle el aporte de la cocaína a la economía colombiana. Como pueden apreciar el dinero de la cocaína supera a sectores claves de la economía como el sector agrícola (-1.9%), o el de la construcción 4.5%, o el de la electricidad, agua, gas 3.6%. Desconocer ese hecho, es querer tapar el sol con las manos.

Preocupa la disminución en la inversión física fija, del cuarto trimestre del 2022, porque ello puede confirmar las declaraciones del presidente de la ANDI Bruce Mac Master de que muchos inversionistas se están retirando del país .Igualmente el gobierno debe prestarle atención a la salida del país, en los últimos meses de medio millón de personas, como a las transacciones diarias que se realizan a través de la plataforma SET FX a la que solo tienen acceso las entidades vigiladas por la Superfinanciera, es decir bancos y entidades financieras ,cuyas transacciones diarias son alrededor de 1200, con un monto promedio que oscila entre US$900 y US$1.500 millones diarios , y con base a esos movimientos la Superfinanciera fija diariamente la TRM que regirá por un día. Las transacciones que se hacen en las cajas de cambio que son bastantes no se contabilizan para el cálculo de la TRM.

Por supuesto que las medidas del banco de la república frenan la inversión local, ya que esa variable es inversamente proporcional a la tasa de interés. Con esta política restrictiva tengan la seguridad ya lo estamos viviendo disminuirá la demanda y la inversión, y como consecuencia de ello, se incrementará el desempleo, la pobreza extrema y la pobreza monetaria. Aplicamos la misma política monetaria que está aplicando el resto del mundo, aumentando la tasa de interés para disminuir la inflación, pero en Colombia no vemos resultado en ese sentido, la inflación no cede producto de nuestra estructura productiva oligopólica y porque nos convertimos en un país importador especialmente de alimentos unas catorce millones de toneladas, pensar que en vez de producir importamos con dos océanos y cantidades de ríos y lagos pescados y mariscos, arroz, maíz,, sorgo, aceite, cebolla, legumbres, granos, carne de todo tipo, leche y el colmo café , y otros productos que podemos producir en el país, es posible a un costo mayor porque esos productos en su mayoría son subsidiados por los países desarrollados, pero estaríamos generando empleo a nuestros campesinos y a nuestra agroindustria y no en los países que importamos .No podemos continuar con la política de Rudolp Hommes y César Gaviria cuya política de apertura económica se centró en importar alimentos subsidiados, para disminuir la inflación y acabar con la poca industria que teníamos en los años 90.

Igualmente, la subida de las tasas de interés, por parte del Banco de la República está orientada a evitar la salida masiva de capitales parta tratar de evitar que se dispare la tasa de cambio. Ya que en la medida que la FED sube su tasa de interés, se vuelve atractivo invertir en los Estados Unidos, país que le da seguridad a sus inversionistas.

Mientras no cambie la política pública en materia económica seguiremos siendo un país mono exportador dependiente de los recursos que generan los commodites y exportando tan solo un 14.1%, del PIB. Porcentaje demasiado bajo, si tenemos en cuenta que hemos firmado 14 TLC, y el 50%, de esas exportaciones son del sector minero energético (petróleo, carbón, níquel, oro, esmeralda) y el resto impulsada por el café, banano, y flores principalmente.

Las importaciones, representan un 26 del PIB, unos US$52.866 millones, cifra que incide en el déficit en cuenta corriente y que es superior a las exportaciones en un 84%.

¿QUE VIENE PARA EL 2023 EN MATERIA ECONÓMICA Y SOCIAL?

El gobierno, debe analizar fríamente los resultados de la economía del año 2022, para tomar decisiones que conlleven a evitar que entremos en una recesión o que tengamos un crecimiento que oscile como lo contempla el Banco de la República entre 0.5% y 1.1%.

Las proyecciones conocidas de los organismos internacionales, como de otros de Colombia no son halagadores para nuestra economía, es así que se prevé que nuestra economía en el año 2023, crezca así:

Banco Mundial y Fondo Monetario = 1.3%; CEPAL = 1,5%, OCDE =1.2%

Banco de la República = 0.5-1,1%; ANDI = 1.0%; Fedesarrollo =1.5%

Como pueden apreciar, esas proyecciones confirman que nuestra economía esta cuesta abajo, ya se venía venir desde el tercer trimestre del año 2022, y se confirmó con el bajo crecimiento del cuarto trimestre del 2.9%. Solo en mayo conoceremos que paso en el primer trimestre del 2023, pero podemos colegir por las proyecciones que se tienen, que será un trimestre malo, y es posible que crezca en 1.5%, cuando en el primer trimestre del 2022, crecimos al 7,6%.

A ese bajo crecimiento, hay que sumarle que empezamos el año con una inflación del 13.3%, que no cede a pesar de las medidas de política monetaria tomadas por el Banco de la República, un desempleo en el 2022, de 11.2%, con una informalidad del 67%, y superior al 60%, en la Región Caribe un déficit fiscal del 5.6%, del PIB, un déficit en cuenta corriente del 6%, un endeudamiento del 62%, del PIB, unos niveles de pobreza del 40%, y una pobreza extrema superior al 10%.

Una realidad que asume el gobierno del cambio, para ello primero logro que se aprobara una reforma tributaria que le generara $20 billones, durante este año, dinero que se utilizara para garantizarle a madres cabeza de familia sin ingresos, unos $500.000 mensuales, que ya recibieron en el mes de diciembre y que ayudo a incrementar el gasto de las familias. También se destinará a disminuir el déficit fiscal y el endeudamiento para darle cumplimiento a la Regla Fiscal, y a programas de inversión pública, entre ellos la compra de tierras para los campesinos.

Este es el año, de las reformas sociales, el gobierno espera que se le apruebe la reforma a la salud, la reforma laboral, la reforma pensional en la cual deberían incluir una “Renta Básica” de un salario mínimo, para los adultos mayores de 65 años, que no lograron pensionarse y el Plan de Desarrollo.

A las anteriores dificultades, se suman los problemas al interior de su gabinete, cuya crisis estalló hoy, al destituir a tres de sus ministros al estar próximo a cumplir 7 meses de gobierno, sale Alejandro Gaviria quién tenía reservas sobre el proyecto de reforma a la salud, y sin entender sale María Isabel Urrutia y Patricia Ariza.

Finalmente, el presidente Gustavo Petro tiene un desafío grande, por ello no se puede equivocar en las políticas públicas que defina tanto en lo social como en lo económico. No se puede generar incertidumbres, porque estas afectan la actividad económica. Las señales de políticas deben ser claras y entendibles. Debe existir claridad hacia futuro que productos o actividad económica reemplazara los recursos generados por el petróleo, que aporta un 3.3%, del PIB, el carbón que le aporta al PIB 1.5%, y el gas aporta el 1%, entre los tres aportan el 5.8%, del PIB, unos US$11.761 millones, del PIB de 2022, en dólares que fue de US$202.777. No vemos en el coto y mediano plazo como reemplazar esos recursos que son indispensables para el gobierno nacional y para las entidades territoriales productoras.

Aplaudimos la iniciativa del gobierno de señalar al turismo como una de las fuentes futuras de divisas, pero para que sea real, se necesita invertir mucho en infraestructura vial, aérea y hotelera. Durante el 2022, recibimos aproximadamente a cinco (5) millones de turistas extranjeros, que en promedio gastan unos US$1.000 por persona, es decir unos ingresos de US$5.000 millones. Pero para el año 2023, el sector hotelero no contara con el estímulo del IVA, como tampoco con un IVA bajo para los tiquetes (5%) y sin el descuento en el predial que permitió incrementar la oferta de camas y la entrada al país de varias cadenas internacionales. Si el gobierno quiere generar divisas a través de este sector debe fijarse unas metas, por ejemplo, al terminar su mandato llegar a diez (10) millones de turistas, que gasten un promedio de US$1000, nos daría ingresos de US$10.000 millones, pero para ellos tenemos que prepararnos para lograrlo. Austria que es un país, de 8 millones de habitantes, recibe anualmente más de 30 millones de turistas. Francia 90 millones, España 80 millones, Estados Unidos 85 millones, México 35 millones, Argentina 32 millones y República Dominicana 7 millones.

Como política para frenar la depreciación del peso con relación al dólar, el gobierno debe en primera instancia fijar una política pública que conlleve a la generación de divisas, en segunda instancia controlar la fuga de capitales, en tercera instancia diseñar estrategias para repatriar parte del capital fugado ilegalmente, en cuarto lugar facilitar la entrada y bajar los costos de las remesas , en quinto lugar garantizar la estabilidad a la inversión extranjera tanto física como de portafolio , y por último estudiar que trato darle al dinero del narcotráfico, que de acuerdo a los ingresos que genera solo un 30%, de esos dineros entra al país y su participación en el PIB de 2022, oscila entre el 4.5% y el 6%, del PIB, del año 2022. Recuerden que López Michelsen se inventó para legalizar el dinero de la marihuana la ventanilla siniestra como la llamo, Carlos Lleras Restrepo.

En una próxima entrega analizaremos el PIB por sectores productivos, para que vean la evolución de estos, y especialmente lo que sucede con el sector agrícola que decreció en el año 2022. Sector el cual el gobierno espera reactivar con una reforma agraria que permita que el campo vuelva a ser un generador de empleo y a producir los alimentos que necesitamos para el consumo interno y los excedentes exportarlos.

Fuente: https://diariolalibertad.com/sitio/2023/02/28/la-economia-colombiana-cuesta-abajo/